Hay que buscar estar donde uno se merece, no donde lo ponen.
Ahora bien, cada uno sabrá si tiene más o menos de lo que merece, y obviamente es difícil ser objetivo en un tema así, por lo que se me ocurre que una buena medida es el esfuerzo que uno hizo para estar donde uno está y si bajo nuestra percepción ese esfuerzo está por debajo o por encima de la recompensa que obtenemos por dicho esfuerzo. Una posible regla puede ser el esfuerzo y logro de los demás. Y el objetivo sería, previamente planteados objetivos claros, si el esfuerzo realizado es el necesario para llegar a cumplir con esos objetivos, y si no lo son, sea porque los objetivos son muy grandes o muy pequeños, intentar modificar estos factores en pos de un equilibrio objetivos-esfuerzo-logros.
martes, 12 de agosto de 2008
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